Eduardo y el pan es la historia de un muchacho que no tuvo suerte, es la vida sembrada de zancadillas de un niño hambriento y desafortunado que nunca se hizo hombre. Con solo cuatro años quedó desamparado en el mundo y su alma, desde entonces y como desfavorecido y amortajado barco, levó anclas y abandonó para siempre el sólido puerto de su cordura. La novela está dividida en tres partes: «juventud», «miseria» y «locura», y la narración, plagada de esperpénticos personajes, acompañará pudorosamente al lector y lo guiará, con infinito mimo, con ternura y humor, en los sucesivos episodios de hambre y miseria, en las noches en que Eduardo, erigido en lastimoso superhéroe, disfrazado burdamente con un atuendo hallado en la basura, se enfrenta imaginariamente a terribles y desafiantes monstruos.