El ser humano es fuertemente influenciado por su entorno al momento de definir su personalidad, durante su evolución, adopta características de quienes percibe como un modelo positivo, querido y de admiración, al igual, de quienes siente temor u odio. Con el paso del tiempo, crea patrones, formas de interactuar con los demás, que no son propias, son imitadas como mecanismo de defensa para la mente, para utilizar actitudes e ideas de su círculo cercano y traducir como sus propios deseos. Sándor Ferenczi bautizó como introyección a este proceso, que ha sido tomado como referencia por el autor de este material, para recrear las historias y el marcado perfil de cada uno de sus personajes. Cuentos cortos que describen situaciones en las cuales la presión, la ansiedad, y el desorden de las emociones, llevan a sus protagonistas a tomar decisiones desesperadas y fatales. «Los nervios acechaban, su corazón latía como si se quisiera escapar de su pecho, la sensación de mareo e irrealidad se apoderaba de su cabeza, el sudor empapaba su rostro, y la respiración se aceleraba como si se fuera a detener de manera fulminante. Eran los síntomas de las fuertes crisis de pánico que Rafael sufría diariamente después de una noche de copas, lo único que parecía calmarloera arrodillarse frente aquella quebrada y vieja imagen de yeso, pidiendo perdón y redención por sus errores».