
Haz clic en la imagen para ampliarla
MADRE
La poesía se convirtió en un instrumento para cantarle a la vida, creer en una entelequia de eternidad y felicidad, con su primer poemario: Siempre. Con el paso de los años la poesía le ha servido como instrumento para adentrarse en los más diversos sentimientos y con distinta intensidad. Madre viene a ser un punto de inflexión, en este momento el poeta ve que el siempre terrenal es irreal, que al final solo queda el siempre espiritual. Se vislumbra el convencimiento de que el final es más certero que la eternidad, aunque solo se vislumbra, puesto que la esperanza es fruto del deseo. En su lírica permanecen los cantos al amor, en su más amplio espectro, las alusiones a la creación pictórica y artística, la duda metódica como instrumento de conocimiento de la verdad, su ciudad como trocito de paraíso en la tierra… entre otros temas. Una obra que está estructurada en tres bloques y un poema introductorio que surge de una obra del pintor Miguel Carini y que conecta con el espíritu del compendio. Madre es un canto a la esencia, en cierto modo, el reencontrarse con el amor maternofilial en un momento difícil de la vida.