Hace años, cuando Ranma era solo un crío, su padre, Genma Saotome, experto en kenpo o arte de la autodefensa china, se lo llevó con él para entrenarle.Antes de irse, Genma le juró a su esposa que haría de Ranma un hombre hecho y derecho y, no contento con eso, añadió que, si no lo conseguía, se suicidaría siguiendo el ritual del seppuku.

Para su desgracia, desde entonces han ocurrido muchas cosas, entre ellas que tanto él como su hijo cayeron por accidente a sendos manantiales de la zona del Zhou Quan Xiang, en China. Como consecuencia, al contacto con el agua fría, Genma se transforma en panda y Ranma, en chica. ¡La maldición del lugar de la tragedia no es ninguna broma!

Aunque al tocar el agua caliente ambos vuelven a su estado original, ello no significa que la maldición del Zhou Quan Xiang se esfume... ¡¡Ahora está a punto de desencadenarse una nueva tragedia...!!