En el ámbito de las relaciones jurídico-privadas se produce una alta conflictividad que está provocando un incremento en la tasa de congestión judicial en España. Ante esta situación, de manera alternativa a plantear los litigios ante los órganos judiciales que forman parte de la administración de justicia, se está intentando impulsar el uso de los llamados medios alternativos de solución de controversias (MASC), conocidos también como ADR (Alternative Dispute Resolution). Cuando surge un conflicto, las partes pueden adoptar varias actitudes, que van desde la pasividad o evasión del conflicto hasta tratar de evitar el planteamiento del conflicto mediante concesiones, pueden tratar de imponer su solución sobre el otro, pueden tratar de solventar de forma conjunta sus diferencias, ya sea directamente entre ellos o bien mediante diálogo asistido de terceros, o pueden acudir a un tercero ajeno al conflicto para que les ayude a alcanzar un acuerdo (autocomposición) o que les resuelva el conflicto (heterocomposición). La legislación española regula dos procedimientos extrajudiciales destinados a resolver controversias, uno de ellos heterocompositivo y el otro autocompositivo: el arbitraje y la mediación. En esta obra se tratan ambos procedimientos de manera muy didáctica, para que tanto alumnos como abogados, árbitros y, en general, cualquier persona interesada en la materia, puedan obtener conocimientos más profundos en esta materia.